sábado, 8 de mayo de 2010

Historia de Pituflai

Pituflai. - Principio. No probar la sangre. Puedo alimentarme de néctar y jugos.
Lucía. - ¿Qué has comido hoy?
Pituflai. - Ni idea, pero te aseguro que no voy a repetir.

Pituflai. - Hoy me he dedicado al néctar.
ZP. - ¿Y qué tal?
Pituflai. - He probado catorce tipos distintos, a ver qué.
ZP. - ¿Conclusión?
Pituflai. - Las mezclas me sientan como un manotazo.

Óscar. - Hola. ¿Quieres que nos lo partamos?
Pituflai. - ¿Qué tomas?
Óscar. - ¿Eres escrupulosa?
Pituflai. - Lo normal.
Óscar. - Pues mejor que no lo sepas.

Pituflai. - Hoy he probado el jugo de naranja.
ZP. - Tiene muchas vitaminas y dicen que es delicioso.
Pituflai. - Era una naranja amarga.

Lucía. - ¿Sangre?
Pituflai. - He picado a una paloma.
Lucía. - Vaya, ¿te ha gustado?
Pituflai. - No está mal.
Lucía. - Pues has comido muy poco, ¿no?
Pituflai. - He chupado hasta que una familia de piojos me ha echado a patadas.

ZP. - ¿No tenías principios? Lo que has hecho es peligroso. El tablón de bajas está lleno de chupadoras de sangre humana.
Pituflai. - Es de gato.

Pituflai. - No me he podido controlar. Ese crío se me ha puesto a pico.
Lucía. - ¿Qué le has dicho al zapatero?
Pituflai. - Que he repetido gato.

martes, 4 de mayo de 2010

Historia de San

San. - Me encanta el exterior y voy a ser pecoreadora. Espacio abierto, aire fresco...
Segurata. - Antes te toca ser limpiadora, nodriza, cerera, almacenadora y guardiana.
San.
- ¿Con quién tengo que hablar?
Segurata. - Eh, ¿tú me escuchas?

San. - Cuando salga, lo primero que recogeré será polen.
Segurata. - Bien.
San.
- Llego a la flor, me restrego bien y polen al saco.
Segurata. - Perfecto, pero cuidado con las flores insectívoras.

San. - He decidido que empezaré por el agua. El estanque está aquí mismo. No tiene pérdida.
Segurata. - Encontrarla y traerla es fácil. Despegar del agua es lo complicado.
San. - No me líes que ya me he enterado de que no existen las flores insectívoras.
Segurata. - Ah, ¿no?

San. - Vale, lo más fácil debe ser la resina.
Segurata. - Seguramente.
San. - Haré propóleo. Voy a esos pinos y cargo una buena bola.
Segurata. - Perfecto. En un par de días nos parcheas la colmena.

San. - He decidido empezar por el néctar.
Segurata. - Sabia elección.
San. - Tú que tienes experiencia, ¿qué flores me recomiendas para empezar?
Segurata. - Las de boj. A las de naranjo y romero ni te acerques, están secas. Ahora que, no me hagas mucho caso. Hace tanto que no salgo ...

Reineta. - ¿Ya está todo listo? ¿Me dejas pasar? Tengo que prepararme para salir.
San. - Estas reinetas, sólo pensando en salir a divertirse.
Reineta. - Si la envidia fuera más ligera que el aire, estarías flotando, hermanita.

Segurata. - ¿Cómo va por el almacén?
San. - Bien, bien.
Segurata. - ¿Ves como el almacén es interesante? Puede ser hasta divertido.
San. - Seguro. Es más aburrido que ver dormir a una larva.

San. - (Se supone que es así, pero no sale ni una pizca de cera).
Segurata. - Avanzas poco a poco, pero vas bien.
San. - (Suerte que no lleva bien las cuentas).

Segurata. - No noto ninguna corriente.
San. - Es que no ves cómo me van las alas, ¡a toda máquina!
Segurata. - O le das más caña, o al almacén.

Segurata. - Hazlo bien.
San. - ¿Acaso lo hago mal?
Segurata. - ¿Has oído hablar de la jalea del olvido? Te la dan y vuelta a empezar de limpiadora.

San. - ¿Se puede saber qué te he hecho yo?
Segurata. - La cuestión no es lo que has hecho, sino lo que puedas hacer. Es por si acaso.

Reina. - ¿Todo bien?
San. - Perfecto.
Reina. - Estamos solas. ¿Todo bien?
San. - De cera, ni gota. Ventilar, flojillo. En el almacén, me muero de aburrimiento ... Reina. - Esa es la apasionante vida de la abeja.

San. - Tengo el permiso de la Reina.
Segurata. - A ver si regresas sin problemas.
San. - Soy abeja pecoreadora. He nacido para esto.
Segurata. - Ya, seguro que te irá tan bien como la cera.

lunes, 3 de mayo de 2010

Historia de Pituflai

Pituflai. - Principio. No acoplarse. Si eliminas el sexo también eliminas gasto de energía y tiempo de no control.
Lucía.- Ya decía mi abuela que la virginidad alarga la vida.
Pituflai. - ¿Conociste a tu abuela?
Lucía.- Es un decir.

Pituflai
. - He roto un principio.
Lucía.- No me lo puedo creer.
Pituflai. - Sí, créeme, ha habido acoplamiento.
Lucía.- Lo que no me puedo creer es que me lo estés explicando a mí.

Pituflai
. - ¿Qué crees tú que estresa más, una vida corta, acoplarse tanto como puedas y tener mucha descendencia o una vida larga y sin acoplamientos en la que lo que importa cada día es sobrevivir alimentándose de sangre humana?
ZP. - Darle vueltas al asunto.

Pituflai. - Ahora tendré descencencia inconsciente del valor de su propia vida.
ZP. - Como todos los mosquitos y el resto de los bichos.
Pituflai. - Pero yo tengo principios.
ZP. - Perdona, lo había olvidado.

Pituflai. - Ya he hecho la puesta.
Lucía.- Vaya, en diez días empezaran a venir por aquí una tropa de mosquitas con principios.
Pituflai. - Las mosquitas con principios no nacen, se hacen.
Lucía.- Usted perdone.

Lucía.- ¿Qué tal la miel?
Pituflai. - Se me pegaron las patas, se me atascó el pico y me entró un ataque de tos.
Lucía.- Vaya, te sentó como un manotazo.

Pituflai. - Rompí un principio.
Plis.- Lo sé. Pero solo fue una vez.
Pituflai. - No me lo puedo creer. Hay quien no tiene ni idea del concepto intimidad.

Historia de San

Zaca. - Me gustas. Tienes pinta de obrera pero haces y desaces como una reina.
San.
- Vale, te gusto porque soy rarita.
Zaca. - Pues será por eso.

San. - Tú también eres rarito. Se supone que deberías ir loco detrás de las reinetas.
Zaca. - No sé por qué tendría que hacerlo.
San. - Por tus hormonas.
Zaca. - Pues sí que debo ser rarito.

San y Pituflai

Pituflai. - ¿Qué hace un humano cuando se encuentra una abeja?
San. - No mueve ni un músculo hasta que se va.
Pituflai. - Cuando ve un mosquito puede llegar a descoyuntarse con tal de liquidarlo.

Pituflai. - Acabo de tener una revelación. Estamos conectadas: los humanos se alimentan de tu miel y yo me alimento de la sangre de los humanos.
San. - Vale. Me encanta saber que eres una superparásita y yo tu superhuésped.

San. - Me gustaría entrar y salir. Tienes suerte, eres libre.
Pituflai. - La única pega es que mi fuente de alimentación tiene unas manos muy grandes.

jueves, 29 de abril de 2010

Historia de Pituflai

Kike. - Hola. Hace tres dias que no veo a nadie. ...bla, bla, bla... Esta ruta está muy poco transitada. ...bla, bla, bla... Parece com si todo el mundo se desviara de este camino.
Pituflai. - No se por qué será.

Kike.
- Para mí, cada comida es todo un ritual. ...bla, bla, bla... Primero una buena conversación, ...bla, bla, bla..., después comer, ...bla, bla, bla... y por último una siesta.
Pituflai. - Creo que tengo que irme.
Kike. - Tranquila, hoy ya estoy servido.

Pituflai. - Intenta escuchar el silencio durante un minuto.
[Silencio dramático. Durante pocos segundos]
Kike. - Solo una cosa. Yo creo que el silencio está sobrevalorado. ...bla, bla, bla... No es nada difícil. ...bla, bla, bla... ¿Ves como puedo escuchar?
Pituflai. - Lo que no puedes es callar.

Pituflai. - Te traigo un regalo. Es propóleo. Te ayudará a escuchar.
Kike. -. ¿Es mágico?
Pituflai. - No, pegajoso. Cierra la boca y séllatela.

Lila. - ¿Qué has hecho?
Pituflai. - ¿Yo? Nada.
Lila. - Por tu culpa he perdido el rastro. Voy a morir.
Pituflai. - Ahí tienes el rastro.
Lila. - Uf. Un despiste puede ser el final.

Lila. - ¿Qué te pasa?
Pituflai. - No quiero despistarte, tú a lo tuyo.
Lila. - Quiero ayudarte.
Pituflai. - ¿Has visto a un mosquito alto y guapo?
Lila. - Ayer vi a uno con la araña. ¿Sabes qué? Tengo un poco de prisa, así que yo a lo mío.

Pituflai. - ¿Has visto a un mosquito alto y guapo?
Kike. -Veo a una mosquita enamorada. ...bla, bla, bla... El amor es hermoso. ...bla, bla, bla... Querer no trae más que disgustos.
Pituflai. - ¿No te lo habrás comido?

martes, 27 de abril de 2010

Historia de Pituflai

ZP. - Si pasan tres días y no han vuelto, marca.
Pituflai. - ¿Y si vuelven después?
ZP. - Nunca vuelven.

Roc. - Hey, bichi, ¿te vienes a Las Arenas?
Pituflai. - ¿De qué va?
Roc. - Adrenalina a saco.
Pituflai. - No me irá mal un poco de emoción.
Roc. - Te va a salir hasta por las antenas.

Pituflai. - Estás más loco que una polilla. ¡Me metes en un arenero lleno de niños con cubos y palas!
Roc. - Lo que yo te diga, adrenalina a saco.

Pituflai. - Han pasado cuatro días.
ZP. - Ya.
Pituflai. - Dijiste que a los tres días, marca.
ZP. - Me olvidé.
Pituflai. - Ya.

Pituflai. - Hola. He mandado al ciempiés a paseo.
ZP. - Bien. ¿Y la mosca?
Pituflai. - No me agobies.
ZP. - Ya sabes, vida larga o emoción breve.

Pituflai. - Necesito mis propios principios.
ZP. - Quieres decir normas, reglas.
Pituflai. - Principios queda más serio.
ZP. - Dónde va a parar.

Pituflai. - Principio. Chupar lo justo.
Lucía. - Cuántas la habrán palmado en el sitio por llenar el buche.
Pituflai. - Muchas gracias por la imagen.
Lucía. - No hay de qué.

Pituflai. - Principio. Volar sin hacer ruido.
ZP. - Yo conocí una mosca sin alas. Subía a los árboles apuntaba y se tiraba.
Pituflai. - Rectifico. Principio. Volar haciendo poco ruido.
ZP. - Mucho mejor.

Pituflai. - El problema es que cuando picas se defienden.
Lucía. - Tendrías que hacer como las sanguijuelas. Anestesia y picotazo.
Pituflai. - ¿De dónde sacan la anestesia?
Lucía. - Ni idea. No conozco a ninguna sanguijuela.
Pituflai. - Descartado el método sanguijuela.

Pituflai. - Principio. Picar cuando duermen.
ZP. - Asegúrate de que no están fingiendo. Son muy listos. Pueden estar en guardia el tiempo que sea con tal de dormir después de un tirón.

Pituflai. - Principio. Picar solo a los adultos.
Lucía. - Qué gran razón tienes. Mis primos murieron fumigados en una casa. La noche anterior un par de mosquitas se habían cebado con el bebé.

Pituflai. - Principio. Ponerse a salvo cuanto antes. Picar, chupar y largarse.
ZP. - Y te vienes para aquí. Nada de juergas ni viajecitos.

Plis. - Hoy cumplo dos semanas
Pituflai. - Pues felicidades.
Plis. - Sigo tus principios.
Pituflai. - ¿Cómo sabes mis principios? No sé para qué pregunto.

Plis. - Estoy dando vueltas a un principio: acoplarse solo por amor.
Pituflai. - Te lo cambio por éste: taparse los oídos nada más entrar aquí.

Lucía. - Suéltate. llevas una vida muy aburrida.
Pituflai. - Qué sabrás tú de mi vida. Apágate.
ZP. - Por una vez deberías escuchar a la iluminada.

Plis. - Yo tengo tres semanas, tú siete. Es mucho más probable que yo te pierda a ti que tú a mí.
Lucía. - Vaya, que tú la diñes antes.
Plis. - No me estás ayudando.

Plis.
- Necesito contacto carnal.
Pituflai. - Ahí fuera hay mucho mosquito encantado de contactar.
Plis. - Ahí dentro es donde faltan unas cuantas conexiones.

Plis. - He venido a despedirme. Me voy con la mosca, pero seguiré con tus principios.
Pituflai. - Quédate.
Plis. - Sabía que te preocupabas por mí.
Pituflai. - No es por ti. Con esa mosca, te será imposible seguir mis principios.

Lucía. - No sé como se lo montan dos mosquitas, pero felicidades por el acoplamiento.
Pituflai. - No vas a conseguir tirarme del pico.

miércoles, 21 de abril de 2010

Historia de Pituflai

Pituflai. - Menudo susto me has dado.
Roc. - Tranqui bichi. ¿Te apetece venir a un concierto de grillo y cigarra? Nada de clásica. Puro rock'n'roll.

Roc. - Ahí estan. ¿A que son buenos?
Pituflai. - Ella es La Bola y ...
Roc. - El grillo se llama Quetedén. No te rias, no preguntes.

Roc
. - Hey, bichi, vamos a La Gota.
Pituflai. - Vamos.
Roc. - A ver que rollo lleva hoy el zapatero.
Pituflai. - ¿Conoces a ZP?
Roc. - Me ha echado tres veces.

ZP. - No vuelvas a traer a ese ciempiés.
Pituflai. - Ha venido por sus propias patas.
ZP. - Vigila con quien te juntas.
Pituflai. - ¿Quién eres, mi padre?
ZP. - Soy el que marca las bajas.

Lucía. - Así que has estado en un concierto de Quetedén.
[Silencio]
Lucía. - ¿Sabes por qué se llama así?
Pituflai. - Ilústrame.
Lucía. - Siete novias y las siete le han soltado la frasecita al ponerle de patitas en la calle.

martes, 20 de abril de 2010

San y Pituflai

San. - Qué te cuentas?
Pituflai. - Mira, por aquí.
San. - ¿Quieres? Te mueres por probarla.
Pituflai. - Gracias. Perdona que yo no te invite.

Pituflai. - Me encuentro al pulgón y me dice...
San. - No me digas que está vivo. Está tan tieso que parece una muda.

Historia de Pituflai

Pituflai. - He probado la miel.
Lucía. - ¿De bote?
Pituflai. - Natural.
Lucía. - Ya. ¿Se la has robado a una abeja? ¿Te has colado en una colmena?

Historia de San

San. - Me han dicho que te gusta la miel.
[Plop]
Glup. - ¿Qué quieres a cambio? ¿Anatomía vegetal? ¿Astronomía? ¿Filosofía?

Glup. - Si la epidermis es demasiado dura, no claves el estilete o busca un punto débil.
San. - Yo no pico.
Glup. - Prueba con tu hermana, la de la puerta.

Glup. - Las constelaciones son un invento de los humanos.
San. - Yo creo en el horóscopo.
Glup. - En el cielo encuentras lo que buscas.
San. - Da gusto lo poco claro que eres. Tu propóleo.
Glup. - ¿Una de filosofía por un tapón de cera?

San. - El pulgón me dijo que buscase en el cielo. He buscado y te he encontrado a ti.
Zaca. - A saber qué planta estaría chupando.

Reina. - Ha llegado el momento de enjambrar.
San. - ¿Por fin ha llegado una de las reinetas?
Reina. - No.
San. - ¿Entonces?
Reina. - Te ha tocado.

Reina. - En dos días nos vamos.
San. - Estás vieja y enferma. Yo iré a enjambrar y tú te quedas.
Reina. - Tienes dos días para convencerme.

San. - Esperabas que fuese yo misma. Mi corazón dice que enjambre.
Reina. - No esperaba grandes cosas de ti. Te quedan veinticuatro horas.

San. - He encontrado colmena. Me llevo a la mitad de mis hermanas.
Reina. - Segurata irá contigo. Suerte a las dos.

jueves, 15 de abril de 2010

Historia de San

Segurata. - Venga, ya estás tardando.
San. - Supongo que ya se te ha olvidado que cuesta salir.
Segurata. - Te espera la Reina.
San. - Vale, sin empujar.

Reina. - Eres especial. La más especial.
San. - (Ya, eso se lo dirás a todas.)
Reina. - Vuelve mañana y explícame que día hace.

Segurata. - ¿Otra vez por aquí?
San. - Pues ya ves.
[Silencio]
San. - (Me manda a ver el tiempo y ahora me hace esperar con esta simpática.)

San. - Ayer y hoy, sol radiante.
Reina. - Así que has salido.
San. - Lo mío me ha costado.
Reina. - Ella hace su trabajo. Ahora vete a clase.
San. - Buf.

Reina. - No espero grandes cosas de ti.
San. - (Muchas gracias.)
Reina. - Solo espero que seas tú misma.
San. - (Podrías concretar un poquito más.)

San. - Limpiar. Acabas por un lado y vuelta a empezar.
Segurata. - ¿Qué es tanto zum zum?
San. - Nada, cosas mías. (He entrado en un bucle.)

San. - Esto de dar de comer a las larvas no está nada mal. Regurgitas, come y se duerme.
[Silencio]
San. - Dicho así, no suena nada bien.

viernes, 9 de abril de 2010

Historia de San

San. - Me he perdido. ¿Sabes hacia dónde queda el lago?
[Silencio]
San. - ¿Lo sabes o no?
[Glup señala]
San. - Tío, muchas gracias por tu ayuda y perdona las molestias.

San. - Vaya día llevo.
[Silencio]
San. - (Otra vez ese chupóptero). ¿Estás seguro de que el lago está por ahí?
[Glup señala]
San. - Vale, nos vemos.

Historia de Pituflai

Lucía. - ¿Óscar? Vino después de su viaje a Etrón, Rus y Etseo.
Pituflai. - Es majo.
ZP. - Lo es. Un minuto, majo. Una hora, liante.

Óscar. - Me gustaría probarla.
Pituflai. - Si quieres vivir muchos días, no te lo recomiendo.
Óscar. - ¿El colesterol?
Pituflai. - Los manotazos.

Óscar. - Voy a hacer otra expedición.
Pituflai. - ¿A Etrón? ¿A Rus? ¿A Etseo?
Óscar. - Ni idea.
[Largo silencio]
Óscar. - Según el viento.

Óscar. - Suéltate y disfruta del paisaje.
Pituflai. - Alucinante.
Óscar. - ¿Tienes hambre?
Pituflai. - Sí.
Óscar. - Hazte una bola, tírate en picado y suerte.

Óscar. - No ha habido suerte, je.
Pituflai. - Estoy casi seca.
[Silencio]
Pituflai. - ¿Cómo volveremos a casa?
Óscar. - No me dijiste que querrías volver.

Óscar. - Vale, a casa. Volamos por encima de las nubes y seguimos la corriente.
Pituflai. - Ni loca.
Óscar. - ¿Es que te he fallado alguna vez?

Pituflai. - Piérdete una temporada, ¿vale?
Óscar. - Eh, te he dado aventuras, emociones, nuevos amigos,...
Pituflai. - Sí, ¿y qúe más?
Óscar. - Y todo bajo control.

Pituflai. - Es curioso, te he echado de menos.
Óscar. - ¿Sí? Vente de expedición.
Pituflai. - Eh, no te pases que no ha sido para tanto.

miércoles, 7 de abril de 2010

Historia de San

Segurata. - La contraseña.
San. - He encontrado unas flores guapísimas.
Segurata. - La contraseña.
San. - (Uf, esa clase hice campanilla).

San. - Flores grandes, mucho polen, mucho néctar, ...
Segurata. - Contraseña o baile.
San. - (Cachis la miel, otra campanilla).

San. - (No puede ser tan complicado, lo hace hasta mi hermana coja).
[Baile]
Segurata. - Patrulla, adelante.
San
. - (Lo que yo decía).

San. - (Aún no han vuelto).
[Silencio]
San. - (Ya ha pasado otras veces).
Segurata. - A las abejas como tú, jalea del olvido y despensa.

Segurata. - San.
San. - (Muy tranquila te veo. Eso puede ser bueno).
Segurata. - Adivina dónde las has enviado.
San. - (O malo, muy malo).

San. - Día de meditación. Daré una vuelta por la despensa.
[Vuelta por toda la colmena]
San
. - ¿Se necesita todo un día para preparar la jalea?

Segurata. - Vas a ir a la Reina.
San. - Chivata.
Segurata. - Te espera la reina.
San. - (Esta vez a la despensa, fijo). Vale, sin empujar.

San. - Ni se te ocurra mirar como ensayo. No quiero risitas.
Zaca. - Tu mandas.
San. - Cachis la miel, tío, te he convencido pronto.

San. - ¿Qué sabrás tú de bailes?
[Baile]
San. - (¿Cómo era?).
Zaca. - ¿Dónde las enviaste?
San. - Ni idea, pero fijo que no había ni una flor.

San. - Ni se te ocurra entrar. Te machacarán vivo.
Zaca. - Tu mandas.
San. - Cachis la miel, tío, te he convencido pronto.

San. - Tengo que ver a la Reina.
Segurata. - ¿Qué has hecho?
San. - ¿Puedo pasar o qué?
Segurata. - Ponte chula y no entras.
San. - Perdón.
Segurata. - Mañana.

San. - Me he enamorado de un zángano. Literalmente.
Reina. - Eso es malo.
San. - Muy malo.
[Silencio]
San. - Pensaba en esa jalea del olvido.

Historia de Pituflai

ZP. - ¿Tu por aquí?
Pituflai. - Pues sí.
ZP. - Bien. Te he guardado tu sitio.
Lucía. - ¿Tu por aquí?
Pituflai. - Te vas a hartar de verme.
Lucía. - A ver si es verdad.

ZP. - Te están buscando.
Pituflai. - No las conozco.
ZP. - Están en tu zona.
Novata. - Eres mí heroína.
Lucía. - Qué bien te lo montas.
Pituflai. - Sí, mejor que quiero.

Pituflai
. - No me voy a enamorar. Va contra mis principios.
[Silencio]
Pituflai. - Me he enamorado. Que no se note.
[Se nota]
Pituflai. - Bien, voy muy bien.

Notas en el móvil

Pensamientos en 100 caracteres.

"Hoy voy a hacer ocho amigos, uno por pata. Estoy en forma. Esto está desierto. Eh, por lo menos uno".
Arantxa sobre su primera telaraña.

"Vaya cara que pone. Parece aterrorizada. De qué debe tener miedo? Ni me ve. Se ha quedado de piedra".
Arantxa ante Violeta.

viernes, 2 de abril de 2010

miércoles, 31 de marzo de 2010

Historia de Pituflai

ZP. - Es vuestro tablón de bajas.
Pituflai. - Glups.
Lucía. - Tienes una esperanza de vida de siete días.
Pituflai. - Pues qué bien.

Notas en el móvil

Pensamientos en 100 caracteres.

"Sé lo que hay y ya me parece bien. Mi futuro es una incógnita. Quiero que todo se quede como ahora".
Gabi antes de la metamorfosis.

"Vuelo. No quería alas, pero ahora me moriría sin ellas. El suelo es un recuerdo lejano y soy feliz."
Gabi después de la metamorfosis.

"Observo sin molestar. Un pequeño despiste y tendrá que empezar de nuevo. Tirar y ajustar las hebras."
Violeta ante Gabi.

"Vengo de un país verde, húmedo, grande. Los frutos y flores son enormes y deliciosos. Es el paraíso."
Rusca al aterrizar.

"Cada día es igual. Aquí mis hermanas trajinan sin fin. Debe haber algo más ahí fuera y quiero verlo."
Violeta en la entrada del hormiguero.

"Me está mirando. ¿Qué debe comer? Espero que no tenga hambre. Ahora me pica el ojo. Y la curiosidad."
Violeta ante Arantxa.

martes, 30 de marzo de 2010